En realidad la película es una crítica a nuestra sociedad, a nuestro sistema, y también a la familia, aunque sea una crítica sutil, por medio de la enfermedad de Walter nos describe cuales son las grietas y los secretos (los cabezazos) de la familia Black...sobre todos los de su hijo Peter Black (Anton Yelchin); en un segundo plano se encuentra la sufridora Meredith (Jodie Foster) sin saber que hacer con la atormentosa enfermedad de su marido Walter. Todas las interpretaciones de la película son excelsas incluso la de Mel Gibson que da total credibilidad a un personaje díficil de describir y de escribir...el castor es como si fuera una segunda persona, un castor implantado en su cerebro (un chip), y nos describe la evolución de esta obsesión.
Una película díficil de realizar sobre todo por el tema terminándola muy bien, dándole un buen pulso a la historia, sobre todo con la relación con su hijo y con la aparición de Norah (Jennifer Lawrence, Winter's bones). Tampoco es la clásica pelícuala efectista que nos cuenta la evolución de una enfermedad, sino que con esa enfermedad nos describe a una familia y al estado en general de como se encuentra la sociedad en la actualidad...
Os aconsejo la película, y atención a Mel Gibson..se sale en el papel de Walter Black. Una grata sorpresa. Me recuerda a veces la genial película de Mel Gibson "El hombre sin rostro"...
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